El otoño, al igual que ocurre con los humanos, afecta a los gatos. Y es que, además de la muda de pelo típica de esta época, el estado de ánimo del felino también puede verse mermado. Los gatos notan los cambios de luz y, por tanto, la progresiva disminución de claridad del otoño puede hacer que se sientan más apáticos. Por este motivo, es muy importante prestar atención al estado de ánimo de nuestro gato y conocer los cuidados básicos que pueda necesitar.

Evita resfriados a tu gato: vigila su alimentación

Para la aparición de resfriados, tan común en esta época del año tanto en personas como en mascotas, lo mejor es mantener un sistema inmunológico fuerte. Y para ello una de las mejores opciones es la de ofrecerles una alimentación adecuada con alto valor nutricional y con más cuerpo, como proteínas, vitaminas, grasas y minerales, así como suplementos que fortalezcan las defensas. Además, los suplementos como el omega 3 favorecerán el correcto crecimiento del pelo de nuestra mascota y mantendrán la barrera dermatológica fuerte frente al frío.

No obstante, lo mejor será siempre consultar con tu veterinario y tener en cuenta la raza de gato y sus hábitos. Pero, en general, estos nutrientes le sirven para hacer frente al frío del invierno y superar también sin problemas otro momento característico del cambio de estación: la muda de pelo de otoño.

Muda de pelo en otoño: el vinagre, el mejor aliado contra los pelos

El tema del pelo en los gatos es un factor determinante a la hora de cuidarlos. El animal renueva su pelaje, que se convierte en una capa más tupida para afrontar las temperaturas más frías. De forma natural irá eliminando ese pelo muerto para renovarlo poco a poco, con las lógicas molestias que los pelos pueden causarnos. Para frenar su caída, lo mejor es, además de proporcionarle una dieta equilibrada, cepillarle habitualmente y hacerle un seguimiento regular que podemos realizar aquí, en La Gallega Clínica Veterinaria.

Otro punto a tener en cuenta es cómo limpiar la ropa de los indeseables pelos. Si bien es muy útil quitar el exceso de pelo con un rodillo, no es la solución definitiva, ya que éste seguirá ahí incluso después de pasar por la lavadora. Para completar el proceso, se recomienda añadir media taza de vinagre en el último aclarado del lavado de la ropa, con lo que se evita que las fibras retengan los pelos. También hay productos antiestáticos que hace que los pelos se desprendan con más facilidad.

Dale calorcito: vigila dónde colocas su arenero

Los gatos de pelo corto, sobre todo, tienen más problemas con la bajada de temperaturas y el aumento de la humedad. Para evitar que pase frío en esta época del año, si normalmente tienes el arenero fuera (ya sea en la terraza o en un patio), lo recomendable es tenerla dentro y en un lugar tranquilo, como el baño. Y para evitar que se produzcan los malos olores en casa, lo aconsejable es utilizar una arena aglomerante de buena calidad, que tiene un grano grueso, lo que reduce su arrastre, o con un grano más fino y eficiente en su uso. Además, es importante mantener una limpieza frecuente e, incluso, utilizar arenas perfumadas.

Dedícale tiempo: juegos con hojas secas

Los mininos disfrutan de nuestra compañía y algo que puede animarlos a salir de su estado aletargado es que les prestemos más atención, les demos más mimitos y juguemos más con ellos, aunque solo sea una hora al día. La naturaleza siempre ofrece muchas ideas para entretener a los felinos y en otoño hojas que caen de los árboles son perfectas para perseguir y atrapar. Los gatos se sienten atraídos por su consistencia seca, pues al tocarlas se produce un crujido, lo que les invita a cazarlas y morderlas. Un juego muy sencillo con el que estarán muy entretenidos.

Siguiendo todas estas pautas, no solo conseguirás que tu mascota se sobreponga a su apatía estacional, sino que le descubrirás también una época del año perfecta para que pueda acurrucarse y pasar más tiempo contigo.