Al igual que nos ocurre a las personas, el estrés es un problema diario al que se enfrentan nuestras mascotas. La ansiedad, el miedo y las fobias aparecen cuando un animal no sabe gestionar correctamente los estímulos externos.

La ansiedad se caracteriza por una gran inquietud, excitación e inseguridad que puede presentarse por muy diversos motivos. Los motivos más comunes son la separación de los dueños y el hambre.

Comer con ansiedad es malo para nuestra mascota y puede producirles vómitos y dolor estomacal. Como terapia preventiva, existen en el mercado comederos diseñados para ayudarles a ingerir despacio, así como piensos con dosis grandes que les obligan a masticar durante más tiempo el alimento.

Por otra parte, la ansiedad causada por la separación puede originar situaciones indeseables, como destrozos en la casa y deposiciones en sitios inapropiados. Para evitar su ansiedad, debemos incrementar de poco en poco el tiempo que pasan sin nosotros desde que aún son cachorros. De esta manera comprenderán que no están siendo abandonados durante nuestra ausencia, pues siempre acabamos volviendo junto a ellos, por lo que no tienen nada de lo que preocuparse.

El miedo, por su parte, es la sensación de angustia ante un peligro real o imaginario. Los miedos intensos pueden desembocar en fobias hacia una persona, hacia una cosa o hacia una situación determinada. En nuestros amigos caninos, las fobias más comunes se deben a los ruidos fuertes y a la presencia de desconocidos u otros perros o animales indeseados.

La mejor forma de prevenir la ansiedad y las fobias en nuestros perros es proporcionándoles una educación correcta. Debemos favorecer su sociabilización con personas diversas y con otros animales del entorno. Además, una buena estrategia es acercarles paulatinamente y con delicadeza a los elementos que puedan provocarles terror, para atenuar su sensibilidad poco a poco.

No obstante, ante cualquier problema de conducta, debemos buscar la ayuda profesional. Los veterinarios de La Gallega Clínica Veterinaria os recomendarán los mejores productos para calmar a nuestros amigos, según su caso. Además, el adiestrador ayudará a que tu  mascota afronte de forma correcta las situaciones cotidianas de su vida.

Qué mejor que un perro sano, tranquilo y feliz.